Adiós a Joan Sutherland

“La voz más importante de los últimos cien años” (Pavarotti)

Nació un 7 de noviembre de 1926, en Sydney, Australia. Joan Sutherland fue instruida desde muy pequeña por su madre, al mismo tiempo que por Jon y Aída Dickens. La joven Joan recorrió Australia interpretando conciertos y oratorios. Su verdadero debut se produjo también en Sydney a los 21 años en el papel de Dido, en Dido y Eneas de Purcell. Ganó el concurso de canto Mobil Quest, lo que le permitió completar sus estudios en Londres, en la Opera School del Royal College of Music.
En un principio, y dada su robustez corporal y vocal, se decidió por los papeles wagnerianos. El director y pianista australiano Richard Bonynge,(con quien se casaría en 1954), supo ver en ella la capacidad de acometer otros roles, concretamente del belcantismo italiano.
Fue capaz de destacar en papeles que por tradición , no tendrían que haber encajado en ella, el belcanto romántico. Su gran peculiaridad fue la capacidad de combinar la coloratura y las agilidades con una voz grande y poderosa, más propia de sopranos dramáticas que de coloratura. Todo ello, gracias a una técnica depuradísima y a una resonancia facial favorecida, sin duda, por la importancia de sus mandíbulas.
Estas cualidades le permitían interpretar desde una Violetta verdiana a una Norma, con unos sobreagudos perfectos, capaces de romper, no una copa, sino todas.
Otra de las herencias que deja y de las que debemos estarle agradecidos, es haber rescatado multitud de partituras casi desconocidas para el gran público y que ahora forman parte del repertorio. Tarea esta que compartió con sus grandes amigos Montserrat Caballé, Alfredo Kraus o Marylin Horne.
Sus últimas actuaciones en España se produjeron a finales de los ochenta, en el Liceu, junto a Alfredo Kraus, también en los últimos años de su carrera. Fue una enamorada de España que, ya retirada, se dejaba ver en casi todas las ediciones del festival de canto Francisco Viñas de Barcelona, como miembro del jurado.
La “Stupenda”, como se la conocía en el mundillo, ha dejado un gran legado discográfico para que podamos seguir escuchándola:

– Bellini: Beatrice di Tenda. Pavarotti, Veasey, Bonyngue. DECCA (R, 2006)
– Bellini: Norma. Caballé, Pavaroti, Ramey, Bonyngue. DECCA (R, 2006)
– Donizetti: Lucia di Lammermoor. Cioni, Merrill, Siepi, Pritchard. DECCA (R, 2006)
– Haendel: Alcina. Berganza, Alva, Sciutti, Freni, Bonyngue. DECCA (R, 2006)
– Mozart: Don Giovanni. Wächter, Taddei, Schwarzkopf, Alva, Giulini. EMI (1961)
– Rossini: Semiramide. Horne, Bonyngue. DECCA (R, 2006)
– Verdi: Rigoletto. Cioni, MacNeil, Sanzongo. DECCA (R, 2006)