El Liceu accesible a las personas sordas

El Gran Teatre del Liceu ha presentado la puesta en marcha de un bucle magnético, con el objetivo de favorecer que las personas con sordera puedan disfrutar plenamente de los espectáculos.
El acto ha contado con la participación de Roger Guasch, Director General del Liceo, José Luis Aedo, Presidente de Fiapas, Xavier Grau, Delegado de la Fundación Once, Santiago Moreno, Director general de la Fundación Vodafone, Josep Ollé, representante de la Fundación La Caixa y Director de Palau Macaya, y Raimon Jané, Presidente de Acapps.

La instalación del bucle magnético, que tiene cobertura en toda Sala, el Foyer, la Taquilla y el guardarropía, supone que las personas que llevan prótesis auditivas (audífonos o implantes) podrán escuchar la música con mayor calidad y, en general, mejorar la recepción del sonido.

De esta forma el Liceu se sitúa al frente de los teatros de ópera del mundo que se dotan de esta tecnología, que cumple con la normativa de calidad perceptiva en esta materia y que ha sido validada por diferentes grupos de usuarios de prótesis auditivas.

El primer espectáculo en el que se usara plenamente esta tecnología será el estreno, el próximo viernes, de la ópera Porgy and Bess, una vez realizadas diversas pruebas durante los ensayos esta semana.

Esta iniciativa se suma a otras emprendidas en el Liceu con otros colectivos de discapacitados, como el servicio de audio-descripción para personas ciegas durante las óperas. Ambos proyectos forman parte del proyecto “El Liceu accesible”.

El Director General del Liceu, Roger Guasch, ha explicado que la iniciativa del bucle magnético forma parte del Proyecto Social del Teatro: “Es uno de los tres vectores del Plan Estratégico 2014-2017, que persigue volver a la sociedad lo que la sociedad da al Teatro”.
Ha dicho que se tiene que hacer del Teatro un espacio accesible y que esto significa “dar acceso a la cultura a los colectivos que ahora padecen dificultades para disfrutar plenamente de la oferta musical”.

En este sentido, ha anunciado que se pondrá en marcha una “Auditoría de la Accesibilidad”, para poder determinar las dificultades de acceso al Liceu que tienen determinados colectivos. “Se trata de conocer cuáles son las barreras y tomar las medidas necesarias con la participación de diversas asociaciones de colectivos con minusvalías, que nos ayudaran a superar las carencias del Teatro en esta materia”, añadiendo que se trata de “no sólo cumplir con la ley sino ir más allá y hacer del Liceu un lugar de encuentro de la sociedad, un Liceu para todos”.