Son ya unas cuantas las veladas especialmente emocionantes que el público del Teatro de la Zarzuela ha vivido a lo largo de esta temporada 2016-2017, y la fiesta aún no ha terminado. El próximo sábado 25 de marzo volverá a ser un día señalado para este coliseo, al que regresa ‘La viejecita’, obra de la que este año se cumplen 120 de su estreno absoluto en este mismo escenario, y ‘Château Margaux’, 130 años después de su primera representación en el Teatro Variedades de Madrid. Lluís Pasqual ha unido en un programa doble estas dos pequeñas joyas compuestas por Manuel Fernández Caballero, con libreto de Miguel Echegaray y José Jackson Veyán respectivamente, presentando así su personal versión con la que transforma el Teatro de la calle Jovellanos en un estudio de radio de la España de los años 50. Están programadas once funciones hasta el sábado 8 de abril.
El montaje es una producción del Teatro Arriaga de Bilbao, en coproducción con el Teatro Campoamor de Oviedo y el Grec´09 Festival de Barcelona. La puesta en escena está firmada por el propio Lluís Pasqual, mientras que el Maestro Miquel Ortega (a quien también pertenecen los arreglos para piano de los anuncios publicitarios de la época) asumirá la dirección musical al frente de la Orquesta de la Comunidad de Madrid (Titular del Teatro), del Coro Titular del Teatro de la Zarzuela y de un excelente doble reparto, cada uno de cuyos integrantes interpreta diversos roles a lo largo del espectáculo.
Este elenco está encabezado por el actor-cantante Jesús Castejón, que hará las veces del Locutor Ricardo Gracián y de Don Manuel, por las sopranos Ruth Iniesta y Sara Blanch, que serán Angelita Vargas, Dolores Izquierdo y Luisa, cada una en su reparto correspondiente, y por los barítonos Borja Quiza y el panameño Ricardo Velásquez, que harán las veces de Comandante, Don Francisco de Borja Talvez y Carlos (ese joven que se hará pasar por la viejecita del título –que en la función que propone Pasqual es una suerte de radionovela dentro del programa sabatino ‘La Zarzuela del Sábado’– para lograr los encantos de su amada Luisa). El resto de protagonistas son el tenor Emilio Sánchez (Capitán Esteban Martín, Manuel Farinas y Federico –rival de Carlos en la disputa por el amor de la dulce Luisa–), el barítono Miguel Sola (Brigada don Conrado Salvatierra y Sir Jorge), el barítono Antonio Torres (Teniente don Luis María Fernández Canedo y Fernando) y el actor Lander Iglesias (Sargento don Rafael Pontejos, Técnico de sonido y Marqués Aguilar).
Paco Azorín, a través de su escenografía, es el responsable de transportarnos a aquella España en blanco y negro de los años 50 en la que, en palabras de Iñaki Gabilondo, “la radio era el technicolor”. Y para ello cuenta con la feliz connivencia de Isidre Prunés, un mago del figurinismo de teatro y cine, también reconocido escenógrafo, fallecido prematuramente en 2014. Asimismo, los movimientos actorales y dancísticos de los intérpretes cuentan con la ilustre ayuda de la coreógrafa Montse Colomé.
Montaje premiado. Recuerdos de infancia
La adaptación de Château Margaux y La viejecita presentada por Lluís Pasqual, ganó en 2009 el Premio al mejor espectáculo operístico de la temporada que cada año conceden los Críticos de Ópera de Barcelona.
Y no es de extrañar que el trabajo haya resultado así de convincente, ya que el director de escena asegura que la zarzuela forma parte de sus recuerdos de infancia, “tan lejanos y recientes como las voces de mis padres o los sonidos que salían del aparato de radio a todas horas”. Hasta tal punto es así, que de hecho asegura que todas estas evocaciones pertenecen “al mismo cajón de la cómoda de la memoria”. Cuando Emilio Sagi le encomendó la dirección de este programa doble en el Teatro Arriaga, “el cajón se abrió solo y empezó a desprender un perfume de aromas conocidos: ¡Cuántas veces había escuchado el vals de Châteux Margaux en la voz de mi madre…!”, desvela Pasqual, quien además declara que La viejecita fue la primera «obra dramática» que se aprendió de memoria, “de cabo a rabo, cantables incluidos”.
Ese perfume de antaño, de pronto revivido, le hizo recobrar un mundo tierno “hecho de pequeñas esperanzas y sueños vividos «por poderes» a través de la radio con sus concursos, su propaganda, sus mentiras emocionantes, sus cuadros de actores y sus zarzuelas ambientadas en lujosos palacios y en lugares exóticos”.
En torno a ‘Château Margaux’ y ‘La viejecita’
Como ya es habitual, en torno a este estreno el Teatro de la Zarzuela ha preparado una serie de actividades:
- Conferencia ofrecida por el filólogo Julio Vélez Sáinz, director del Instituto del Teatro de Madrid de la Universidad Complutense. En colaboración con los Amigos de la Ópera de Madrid. Lunes 20 marzo; ambigú del Teatro.
- Ensayo y posterior encuentro de Lluís Pasqual con alumnos de diversas disciplinas de Artes Escénicas. Jueves 23 de marzo; sala principal del Teatro.
- Encuentro del Maestro Miquel Ortega con alumnos de Dirección de orquesta y Composición de distintos centros especializados. Lunes 27 de marzo; ambigú del Teatro.
Proyección de un vídeo en homenaje a la famosa tiple Lucrecia Arana, que fue la encargada de estrenar ‘La viejecita’ hace 120 años en este escenario, y de quien asimismo se cumplen 150 años de su nacimiento y 90 de su muerte. El vídeo será exhibido antes de cada función y de forma continuada, en dos pantallas dispuestas en el vestíbulo principal del Teatro.