Con dirección musical de Francesc Prat, escena de Pablo Viar, escenografía de Frederic Amat y vestuario de Gabriela Salaverri.
El resto del reparto lo integran Auxiliadora Toledano, Ruth González, Erika Escribá-Astaburuaga, Lidia Vinyes-Curtis y Mireia Pintó.m.
Se trata del regreso a escena de María Bayo al Teatro de la plazuela de Jovellanos después de más de una década.
El Teatro de la Zarzuela y el Museo Thyssen-Bornemisza organizan conjuntamente ‘Frederic Amat, la escena pintada’, una retrospectiva de la obra teatral del artista que se expone en la pinacoteca hasta el 27 de noviembre.
María Bayo, que regresa a la Zarzuela después de más de una década sin subir a escena en sus tablas, mantendrá un encuentro con los alumnos de la Escuela Superior de Canto de Madrid e impartirá ‘masterclasses’.
Frederic Amat dará una charla en el Museo Thyssen-Bornemisza el jueves 10 de noviembre, y el lunes 14 se reunirá con alumnos de Escenografía, Bellas Artes y otras disciplinas artísticas y teatrales en una sesión doble que comenzará en el espacio donde se expone su obra en el Museo Thyssen y concluirá en el Teatro de la Zarzuela con un pase técnico de la escenografía de ‘Iphigenia en Tracia’.
Ese mismo día el musicólogo Juan José Carreras ofrecerá una conferencia acerca de la obra organizada por los Amigos de la Ópera en el Ambigú del Teatro.
El 24 de noviembre Francesc Prat y Pablo Viar mantendrán una conversación en el Ambigú del Teatro con estudiantes de Dramaturgia, Dirección de escena, Dirección musical y Musicología.
La función del día 25 será grabada por Radio Clásica para su próxima emisión.
El Teatro de la Zarzuela presentará a partir del martes 15 de noviembre el estreno en España en tiempos modernos de la versión escénica de ‘Iphigenia en Tracia’, zarzuela barroca compuesta por José de Nebra en 1747 con libreto de Nicolás González Martínez. Se trata de una nueva producción del coliseo, en torno a cuyo estreno se han programado numerosas actividades.
En ‘Iphigenia en Tracia’ la soprano María Bayo encabeza un reparto íntegramente femenino que actuará bajo la dirección musical de Francesc Prat, que estará al frente de la Orquesta de la Comunidad de Madrid (Titular del Teatro). La dirección de escena correrá a cargo de Pablo Viar y la escenografía está firmada por Frederic Amat, de quien La Zarzuela y el Museo Thyssen-Bornemisza organizan en este último, hasta finales del mes de noviembre, una retrospectiva de su obra teatral. La figurinista Gabriela Salaverri es la responsable de un espléndido y onírico vestuario.
Bayo regresa al Teatro de la plazuela de Jovellanos después de más de una década sin subir a escena en las tablas de este coliseo. Interpretará el papel de Iphigenia, sacerdotisa que por mandato divino a poco está de asesinar a su hermano Orestes sin saber el parentesco que a ambos une. La soprano Auxiliadora Toledano encarnará a Orestes, el príncipe griego que llega para romper el orden establecido y que no imagina hasta qué punto va a lograr su cometido, mientras que la soprano Ruth González, hará las veces de Dircea, princesa cuyo prometido, Polidoro, se enamora de Iphigenia, pero que a su vez cae rendida a los encantos de Orestes. La también soprano Erika Escribá-Astaburuaga, será el príncipe Polidoro, y las mezzosopranos Lidia Vinyes-Curtis y Mireia Pintó darán vida, respectivamente, a Cofieta y Mochila, que son el contrapunto terrenal al resto de personajes, el contraste burlesco a los tejemanejes que se traen los demás.
La escena
El director de escena, Pablo Viar, que ha trabajado, entre otros, junto a Sam Mendes o Kevin Spacey, destaca que la historia es “una aproximación poética hacia el evocador universo de los mitos griegos, de la interpretación de los sueños y de la compleja naturaleza del amor”.
Esta nueva producción del Teatro de la Zarzuela no busca únicamente mostrar una historia mítica, sino que plantea una novedosa forma escénica para revelar emociones y sentimientos a través de la belleza de la música de Nebra. Su marcado espíritu español, con multitud de posibilidades dramáticas, permite su agrupación y enriquecimiento con el fin de aproximarse al público, que este disfrute de la belleza barroca.
La propuesta escénica busca la modernidad, la claridad, la belleza, la fineza en los acabados de cada personaje para así definir los principios fundamentales de la obra.
Por su parte, la propuesta escenográfica de Frederic Amat hace que la historia de la joven Iphigenia adquiera una clara dimensión actual que evoca, antes de nada, un mundo poético: primero con una coreografía escultórica en movimiento y luego con gigantescos lienzos que se pintan ante nuestros propios ojos.
La zarzuela barroca ‘Iphigenia en Tracia’ de José de Nebra, cuyo libreto está firmado por Nicolás González Martínez, fue estrenada en el Teatro de la Cruz de Madrid el 15 de enero de 1747, precisamente cuando el compositor comenzaba a trabajar para Fernando VI, recién coronado rey y gran aficionado a la música.
La ORCAM (orquesta Titular del Teatro) está reforzada para la ocasión por la concertino Cecilia Bercovich, el clavecinista Aarón Zapico y el violonchelista Amat Santacana. Estos dos últimos se encargarán del bajo continuo.