Uno de los directores musicales más internacionales, José Miguel Pérez-Sierra, inició en septiembre el curso en plazas ya conocidas y muy queridas por el músico madrileño: el 9 de septiembre dirigió a la Sinfónica de Galicia en una emotiva Gala Rossini programada por Amigos de la Ópera de A Coruña en homenaje al gran Alberto Zedda, legendario director, musicólogo y gestor, responsable del Festival Rossini de Pésaro fallecido en marzo pasado y con quien Pérez-Sierra mantuvo una estrecha relación personal y profesional: fue su asistente y colaborador entre 2004 y 2009. Este mismo mes (días 15 y 23) regresó al podio de la Sinfónica de Euskadi con dos conciertos para el Festival Internacional de Cine de San Sebastián. En octubre la agenda del maestro madrileño lo pondrá nuevamente de actualidad en Italia, país en el que ha desarrollado buena parte de su carrera desde que debutara en el Festival Rossini de Pesaro en 2006; los días 13 y 15 dirigirá Il Barbiere di Siviglia en el Teatro delle Muse (Ancona).
Más tarde viajará a Canadá para debutar en la Opéra de Montréal con otro Rossini, La Cenerentola (11, 14, 16, y 18 de noviembre), dirigirá un concierto sinfónico junto a la Orchestre National de Lorreine en Metz (Francia, 26 de noviembre) y subirá de nuevo al podio de la Sinfónica de Euskadi para dirigir un programa que incluye obras de Wagner, Chausson y Debussy en una gira que visitará el Auditorio Kursaal de Donosti (1 y 4 de diciembre), Teatro Principal Antzokia de Vitoria (2 de diciembre), Auditorio Baluarte de Pamplona (5 de diciembre) para concluir en el Palacio Euskalduna en Bilbao (7 de diciembre).