En la recta final de la actual temporada de Flamenco Real, llega al Salón de Baile del Teatro Real uno de los representantes más mediáticos de las nuevas generaciones del cante, con fuerte raigambre flamenca y un arte nuevo forjado en la diversidad musical que le ha rodeado desde la cuna. Su nombre, Kiki Morente.
Los próximos días 30 de junio y 1 de julio, el joven cantaor ofrecerá una propuesta escénica, dirigida por él mismo, en la que contará con la presencia de otros grandes nombres del flamenco, con la colaboración especial de la bailaora Belén López, para celebrar un personal ENCUENTRO FLAMENCO inspirado en la figura de Enrique Morente. Junto a ellos, el espectáculo contará también con la presencia de Antonio Carbonell, al cante; Rafael Jiménez “el Chispas” y José Carbonell, a la guitarra y Carlos Jiménez en la percusión.
Nacido en Granada, hijo del cantaor Enrique Morente y la bailaora Aurora Carbonell, hermano de Estrella y Soleá, José Enrique Morente Carbonell, Kiki Morente, tiene en su linaje materno grandes guitarristas y cantaores -Montoyita, Sabicas- y en sus vivencias y aprendizaje la influencia de maestros como Pepe Marchena, Antonio Chacón, Manuel Torre, Pepe Pinto o El Sevillano, entre otros.
Animado por su padre, Kiki estudia guitarra en el Conservatorio de juventudes musicales de Granada, instrumento que él mismo toca en muchos de sus conciertos. Conoce y estudia el cante clásico, al que imprime su personalidad, y se deja influenciar por artistas de primer nivel de otras manifestaciones musicales como Pat Metheny, Leonard Cohen, Cheb Khaled o Dulce Pontes, a los que conoce a través de proyectos impulsados por su padre.
En 2010 comienza su carrera en solitario y en otoño de 2017 publica su primer disco Albayzín, de corte eminentemente clásico, acompañado por las guitarras de Juan y Pepe Habichuela, Rafael Riqueni, Diego del Morao, Juan Carlos Romero, Montoyita, Juan Habichuela nieto, Josemi Carmona y Juan Carmona “Camborio”.
Fotógrafo: © Juanlu Vela