La Sala Sinfónica del Auditorio Nacional se viste con sus mejores galas para presentar el concierto de clausura de la 29ª temporada de la Fundación Scherzo. Un concierto protagonizado por las sonatas D. 958, 959 y 960 de Franz Schubert interpretadas por Paul Lewis.
El legado musical y pianístico del compositor vienés se puede apreciar en este testamento sonoro, ideado como una trilogía que pretendía dedicar al pianista y compositor Johann Nepomuk Hummel.
Las Tres últimas sonatas abarcan toda una amalgama de emociones y sonidos que van desde la agitación mas exacerbada de la Sonata nº 19 en do menor, D. 958 hasta la serenidad y ensoñación de la Sonata nº 21 en Si bemol Mayor, D. 960. En palabras de Eva Sandoval, quien firma además las notas al programa: «Quizás la reciente muerte de Beethoven en 1827 le liberó a Schubert de la angustia de la influencia que el gran compositor ejercía sobre él y, con estas tres geniales e imaginativas partituras, contribuyó a ensanchar los límites del concepto clásico de sonata».
Siguiendo la senda de algunos de los grandes maestros en este repertorio como son Alfred Brendel o Sviatoslav Richter, Paul Lewis nos propone una visión personal y reflexiva, que sumerge de lleno al espectador en una sonoridad donde los guiños de Schubert a Beethoven son más que recurrentes.
De esta forma, el Ciclo de Grandes Intérpretes clausura su 29ª edición, marcada por toda una serie de novedades que continuarán en el 30º Ciclo de Grandes Intérpretes, cuyo comienzo está programado para el próximo 10 de septiembre, junto a la pianista rusa Yulianna Avdeeva. Además, todos los abonados al 30º Ciclo de Grandes Intérpretes podrán disfrutar de forma gratuita del concierto de Alexandre Kantorow, el próximo 12 de noviembre.