Messa de Requiem, de Verdi, en las noches del Real

junio 2013
Verdi

El 1 y 3 de julio el Teatro Real ofrece su novena noche. La Messa de Requiem de G. Verdi estará dirigida por Teodor Currentzis. El cuarteto solista está formado por la soprano Lianna Haroutounian, la mezzosoprano Violeta Urmana, el Tenor Jorge de León y en bajo Ildebrando D´Arcangelo. Y el Coro y la Orquesta Titulares del Teatro Real.
“Y con él se va la más pura, la más sagrada, la mayor de nuestras glorias. He leído muchos periódicos y ninguno habla  de él como debiera. Muchas palabras pero pocos sentimientos hondos…”. Así se expresaba Giuseppe Verdi en una carta a su amiga la condesa Maffei, a los pocos días de la muerte de Alessandro Manzoni, el escritor y héroe del Risorgimento con el que el compositor se sentía profundamente identificado, no en vano llevaba siempre entre los libros que le acompañaban, además de la Divina Comedia, la Biblia y su I Promessi Sposi. Giuseppe Verdi tomó la iniciativa, como homenaje al que consideraba el mayor poeta de su época, y le planteó al Ayuntamiento de Milán la posibilidad de escribir un Requiem que se estrenara al año de la muerte de Manzoni, en 1874. La idea ya había surgido a la muerte de Rossini, muchos años antes. En aquella ocasión quiso que varios compositores crearan juntos un Requiem, y él escribió el “Libera me”, que luego, cuando el proyecto no llegó a cristalizar, aprovechó, con pocas variaciones, para este Requiem. Por entonces, Verdi contaba sesenta años, se hallaba inmerso en un prolongado silencio musical, después de haber dado a luz Aida, y estaba dedicado sobre todo a los cultivos de su finca de Sant’Agata y a la filantropía. Sin embargo, aún produciría tres obras maestras: el Requiem (1874), Otello (1887) y, finalmente, a sus ochenta años, Falstaff (1893). Bernard Shaw afirmaba que el Requiem sería lo único de Verdi que pasaría a la posteridad. Se equivocó, pero no en la valoración de una obra que es el destilado de la sabiduría musical del maestro de Busseto. Hay quien lo considera incluso “la mejor ópera de Verdi”. (Programa de mano, Teatro Real).