Con Mahler y Lorin Maazel como fuentes de inspiración, no es de extrañar que José Miguel Pérez-Sierra esté considerado uno de los directores españoles de mayor proyección internacional. Conversador brillante e inagotable, analiza con pasión y profundo conocimiento todo aquello que rodea su profesión. Este madrileño disciplinado, sensible y capaz de conducir hasta Moscú, disecciona y estudia las partituras con la precisión de un cirujano persiguiendo la perfección. A José Miguel Pérez-Sierra, como a otros brillantes artistas, las musas siempre le pillan trabajando.