Èlia Casanova y Alfred Fernández presentan » Elvas Quien te traxo el cavallero»

Elia Casanova y Alfred Fernández

La soprano valenciana Èlia Casanova presenta junto al vihuelista Alfred Fernández su nuevo trabajo discográfico, dedicado a los cancioneros ibéricos del siglo XVI. El disco, que lleva por título Elvas Quien te traxo el cavallero y que está disponible en las plataformas digitales desde el 1 de marzo, incluye material recopilado en el Cancionero de Elvas, un manuscrito portugués del siglo XVI con obras musicales profanas escritas fundamentalmente por autores anónimos.

Como afirman los intérpretes, “cuando uno trabaja los cancioneros ibéricos del Renacimiento, enseguida se da cuenta de un detalle curioso e importante: lo agradecido que es hacer sonar este repertorio. La música es buena, muy buena y está muy bien escrita. La maravillosa sencillez y la transparencia de las texturas musicales van acompañadas de unos textos de asombrosa lucidez. El Cancionero Musical de Elvas da buena muestra de esa manera de hacer las cosas”.

Cabe destacar que además de instrumentista, Alfred Fernández es el técnico de sonido de la grabación y que tanto él como y Elia presentan un trabajo especialmente cuidado. Asimismo, Alfred fue el encargado de la grabación de Nana, el anterior disco de Èlia Casanova.

El proyecto cuenta con la colaboración del artista Paco Giménez, Premio Nacional de Ilustración 2019. El reconocido ilustrador valenciano, además de ser el autor de la portada del CD, ha realizado diferentes ilustraciones para acompañar el trabajo que giran en torno a la temática de estos cancioneros.

Sobre el manuscrito de Elvas

Este manuscrito del siglo XVI con música y poemas de la época renacentista, que está considerado una de las fuentes más importantes de música profana en la Península Ibérica, fue descubierto en 1928 en la Biblioteca Municipal de Elvas (Portugal), por el musicólogo Manuel Joaquim y posteriormente publicado en 1940. Es uno de los cuatro cancioneros portugueses del XVI que han llegado hasta nosotros junto con el Cancionero de Lisboa, el Cancionero de Belém y el Cancionero de París.

Se desconoce la fecha exacta de su copia. Sin embargo, algunos factores permiten dar una datación aproximada. Por un lado, en el manuscrito hay una canción con el texto de un poema escrito por el poeta Don Manuel de Portugal, dedicada a su amada Doña Francisca de Aragón. Se sabe que el poema fue escrito alrededor de 1555; por otro, las páginas del libro poseen filigranas parecidas a las que se usaban en Italia hasta la década de 1570.

Todo ello permite afirmar que el Cancionero de Elvas fue copiado entre las décadas de 1560 y 1570, aproximadamente. Además, está dividido en dos secciones: la primera incluye 65 obras musicales (parte de su contenido se ha perdido) y la segunda contiene 36 poemas, sólo el texto, sin música.

Compositores casi desconocidos

La parte musical del libro contiene 65 obras polifónicas a 3 voces, en español y portugués, 3 de ellas incompletas. No hay una sola referencia acerca de los compositores en el cancionero: todas las obras son anónimas. Sin embargo, si comparamos este cancionero con otros cancioneros ibéricos, es posible establecer concordancias y así saber cuáles son los compositores de 7 obras (quizás 8) de las 65 compiladas. Se trataría de Juan del Encina (4 obras), Pedro de Escobar (2 o 3 obras) y Pedro de Pastrana (1 obra).

Del estudio de los datos relativos a las lenguas, formas poéticas, métricas, autoría y concordancias con otras obras, según el estudio de Manuel Pedro Ferreira, se desprende que la parte musical yuxtapone cuatro colecciones, separadas en tiempo y espacio: dos de ellas con obras del repertorio ibérico de alrededor de 1500, una con piezas portuguesas de la primera mitad del siglo XVI, y la última con obras de origen portugués, con influencia italiana, del tercer cuarto del siglo XVI.

Esas colecciones son, concretamente, el mencionado Cancionero de Elvas {Portugal, s. XVI), la música de Francesco da Milano perteneciente a diversas colecciones del siglo XVI y la música de Enriquez de Valderrábano contenida en su Libro de Música de Vihuela intitulado SILVA DE SIRENAS (Valladolid, 1547).