La Flauta Mágica - Wolfgang Amadeus Mozart

El Palau de les Arts Reina Sofía estrenó el 6 de junio en España la espectacular y sorprendente producción de Simon McBurney de “La flauta mágica”, de Mozart, uno de los montajes más aclamados en los últimos años.

Algunas de las claves de “La flauta mágica” y de este montaje:

  • Una de las óperas más representadas del mundo hoy día.
  • Un éxito desde su estreno en 1791 por el propio Mozart y el director teatral Emanuel Schikaneder.
  • El eje de la puesta en escena de McBurney es recrear la esencia de la experiencia teatral que vivió aquel público de 1791 en el Theater an der Wien en Viena.
  • Su apuesta por la tecnología en el montaje no se basa tanto en exhibición de los avances actuales, sino en un guiño al estreno de la propia ópera en Viena, en la que Schikaneder ya estaba a la última en efectos teatrales.
  • Al comenzar la obra se presenta el escenario como un sencillo escenario teatral, que se irá transformando a través de toda la ópera.
  • La orquesta está elevada, como se hacía en el teatro vienés, y eso genera interacción entre cantantes y músicos.
  • Se resalta la importancia de la música al contar esta historia, en especial todo lo que se refiere al poder de la flauta mágica.
  • Los cortinajes clásicos del teatro vienés inspiran a McBurney para el concepto detrás de las proyecciones que acompañan la puesta en escena.
  • Algunas de estas proyecciones son dibujos o escritos hechos a mano sobre una pizarra (manteniendo este elemento artesanal) y que a la vez están siendo realizados a la vista del público por un artista visual, situado a la izquierda del escenario que los dibuja y proyecta en tiempo real.
  • Para completar esta experiencia tan teatral, al otro lado del escenario se ubica un artista de foley o un artista de sonido, que genera también en vivo y con diversos materiales los sonidos que acompañan a los actores en escena.

Simon McBurney señalaba sobre este montaje:

“La flauta mágica es a la vez fantástica y política. Es a la vez un compromiso social y un gran vuelo de la imaginación. Y en el fondo, si pensamos en su contenido social o político, está el deseo de que la sociedad evolucione. En otras palabras, ¿hacia qué tipo de sociedad podemos avanzar?

¿Cómo la escenifico con el menor decorado posible? Lo que verán es un escenario abierto que dejo a la imaginación en la medida de lo posible. Vengo del teatro, así que me interesa mucho desde el punto de vista teatral. Lo que hemos intentado es hacer algo que se inspire en la música. Supongo que intentamos hacer algo que vaya directo a lo que consideramos el corazón de La flauta mágica.

Cuando uno piensa en esta ópera, lo hace en un conjunto de momentos. Uno piensa en los momentos de Papageno y en los momentos de Pamina, y en la Reina de la Noche, por supuesto, que es muy famosa; pero una de las cosas que me han interesado es cómo todos estos momentos interactúan o se contagian unos a otros, y por eso intentar encontrar las conexiones entre momentos ha sido para mí particularmente interesante.

Tenemos que suponer que Mozart puso algo muy profundo de sí mismo en esto. Estaba en la cima de sus capacidades. En lugar de ver La flauta mágica como una especie de pastelería vienesa, quería despojarme de la confitería y revelar algunos de los ingredientes que componen La flauta mágica, para que la gente pueda tener algo de la misma sorpresa y deleite que tuvieron en 1791”.

(Declaraciones de Simon McBurney para a la English National Opera, recogidas en video publicado en la web del MET)

El director musical es James Gaffigan, y la directora de escena de la reposición es Annemiek Van Elst. Junto a la Orquestra de la Comunitat Valenciana y el Cor de la Generalitat, Les Arts reúne a las jóvenes estrellas del momento en el reparto de ‘La flauta mágica’, con algunos de los intérpretes que han conquistado al público internacional con la impactante producción de McBurney.

El tenor italiano Giovanni Sala realiza su tercera incursión en València con el papel de Tamino, mientras que debutan la emergente soprano barcelonesa Serena Sáenz, (Pamina), el bajo británico y favorito del Metropolitan, Matthew Rose (Sarastro), la electrizante y ascendente soprano Rainelle Krause (Reina de la Noche), el barítono húngaro-rumano y asiduo del Covent Garden Gyula Orendt (Papageno) y el reconocido tenor estadounidense Brenton Ryan (Monostatos).

El reparto cuenta, además, con una importante presencia del Centre de Perfeccionament, con integrantes de la actual promoción: Irakli Pkhaladze (Orador), Iria Goti (Papagena), Antonella Zanetti (Primera Dama), Laura Fleur (Segunda Dama); y exalumnos: Alejandro López, Jorge Franco (Dos sacerdotes, dos caballeros). Luzia Tietze (Tercera Dama) y el Trinity Boys Choir (Tres muchachos) completan el elenco.

“La flauta mágica” se representa en la Sala Principal del Palau de Les Arts los días: 6, 8, 12, 14, 17 y 19 de junio.

SIMON MCBURNEY

Actor, escritor y director, Simon McBurney es uno de los creadores teatrales más originales de Europa. Ganador de numerosos premios Olivier y nominado a los premios Tony y SAG, es cofundador de Complicte, «la compañía de teatro más innovadora de Gran Bretaña».  Su trabajo, desde instalaciones hasta la reinvención de textos clásicos en Broadway, siempre ha estado íntimamente ligado a la música. Entre las producciones de ópera más importantes del director británico destacan A Dog’s Heart de Raskatov, Die Zauberflöte, The Rake’s Progress y Wozzeck, que han sido representadas en teatros de ópera de todo el mundo. Con su hermano Gerard McBurney ha desarrollado proyectos como Weimar Nightfall, Out of a House Walked a Man… o Strange Poetry. Ha colaborado con Peter Maxwell Davies, Esa-Pekka Salonen, Simon Rattle, Tom Waits, Nitin Sawhney, Pet Shop Boys y Honjoh Hidetaro. Fue el primer artista británico asociado en el Festival d’Avignon en 2012, con The Master and Margarita abriendo el festival. Como actor aparece en películas como Mission: Impossible – Rogue Nation, The Theory of Everything, Magic in the Moonlight, Tinker Tailor Soldier Spy, Jane Eyre, The Duchess and The Last King of Scotland.

Fotografía ©Miguel Lorenzo Mikel Ponce Les Arts

La flauta mágica, ¡de cine!
La flauta mágica
W. A. Mozart (1756 – 1791)
Die Zauberflöte
Singspiel en dos actos
Libreto de Emanuel Schikaneder
Producción de la Komische Oper de Berlín
Teatro Real Madrid 17/02/20
D. musical: Ivor Bolton
D. escena: Suzane Andrade, Barrie Kosky
Concepto: 1927 (Suzane Andrade & Paul Barritt)Barrie Kosky
Escenografía y figurinista: Esther Bialas
Iluminador: Diego Leetz
Dramaturgo: Ulrich Lenz
D. coro: Andrés Máspero
D. coro JORCAM: Ana González
Reparto: Rafal Siwek, Paul Appleby, Rocío Pérez, Olga Peretyatko, Andreas Wolf, Ruth Rosique, Mikeldi Atxalandabaso, Elena Copons, Grmma Coma-Alabert, Marie-Luise Dreben, Catalina Peláez, Celia Martos, Patricia Ginés, Antonio Lozano, Felipe Bou
E l Teatro Real ha tirado de fondo de armario (lo hizo también esta temporada con su L´elissir d´amore) y ha programado La Flauta mágica que con tanto éxito estrenó la temporada 2016. Hay que decir que en esta ocasión el éxito no ha sido menor. Barrie Kosky y Suzanne Andrade firman una escenografía que hace las delicias de todo tipo de público en una de las obras más populares del repertorio.Le quedaban a Mozart apenas unos meses de vida cuando se estrenó La Flauta mágica, atendiendo un encargo que podría ayudar a sanear su maltrecha economía. El más influyente personaje de la vida cultural de Viena, Emanuel Schikaneder, libretista, empresario, cantante, actor, compositor y director de escena, había pedido a Mozart la composición de un Singspiel, lo que se entendía tradicionalmente por una comedia costumbrista, con personajes campesinos y muy populares en el que se alternaban partes cantadas con recitadas.El género fue evolucionando y empezó a incorporar otros personjes, como nobles y burgueses, sin abandonar nunca el costumbrismo y la humorada.
Mozart consiguió elevar el género del Singspiel introduciendo para ello personajes más propios de la ópera seria y elaborando partituras más complejas musicalmente para alguno de los roles. En La flauta mágica Mozart llena la partitura y el libreto de una serie de claves y referencias masónicas, logia a la que pertenecían tanto Mozart como Schikaneder, y que recorría Europa de la mano de las nuevas ideas de la ilustración. Todos estos elementos enriquecen el género más popular en esos momentos en Alemania y Austria.

Teniendo como eje principal la popularidad de la obra, Barrie Kosky y Suzanne Andrade han desarrollado una escenografía inspirada en el cine y la animación. Para ello han contado con la colaboración de la compañía de teatro 1927, que tiene ya cierta experiencia en trabajar vinculando la animación con personajes reales. El resultado no puede ser más espectacular y atractivo para el público. Pero también entraña algunos riesgos, sobre todo para unos cantantes que, de manera intuitiva, deben interactuar con unas proyecciones que no pueden ver. Otro problema que pueden presentar las proyecciones cinematográficas es que el público preste más atención al vídeo que a los cantantes y la partitura.

Se puede decir que esta producción no tiene escenografía, tan solo una enorme pantalla en boca de escenario sirve para que los cantantes, a través de pequeñas gestualizaciones que imitan el cine mudo, interpreten su papel junto a las imágenes que se proyectan.
En algunos momentos el volumen de imágenes y el movimiento constante puede resultar abrumador para el público. Pero lo cierto es que las nuevas tecnologías y la realidad virtual al servicio del teatro, abren unas posibilidades escénicas, casi infinitas.

La Flauta mágica es una ópera en la que a menudo se prescinde de los recitativos cuya presencia era tan importante en el momento de su composición. Esta producción no es una excepción. Se han eliminado dejando la parte más superficial e infantil, renunciando a la filosofía más profunda e instruida de la obra creada por Mozart. A cambio aparecen entre escenas los típicos carteles que acompañaban el cine mudo y que van narrando brevemente la historia. Todo muy bien encajado en la línea cinematográfica de la producción. En esta ocasión están acompañados del fortepiano de Ashok Gupta, interpretando fragmentos de la Fantasía en Do menor de Mozart.

La dirección musical ha estado a cargo del titular del teatro, Ivor Bolton. Su técnica y corrección a la hora de dirigir es absoluta, pero en esta ocasión la orquesta sonó plana, apagada, con escaso volumen de sonido y sin matizaciones. Faltó la chispa que acompaña las obras Mozart que en esta ocasión solo fue correcto.

Del cuadro de cantantes, que podía haber estado más equilibrado, hay que resaltar su esfuerzo para cantar en unas condiciones en las que habría que verse. Aparecían las más de las veces en pequeñas plataformas a varios metros del suelo. Aunque estaban bien amarrados, hay que valorar su disposición y buen trabajo.
La Pamina de Olga Peretyatko fue de lo mejor de la noche. Una muy buena línea de canto y fraseo para una voz con buen volumen y hermosos timbre.

El norteamericano Paul Appleby fue un Tamino irregular. Posee un bonito timbre, sobre todo en los agudos, a los que llega de un modo extraño en los apoyos.

Rocío Pérez fue la Reina de la noche, pero solo por reparto de roles. Abordó su personaje sin miedo, que no es poco, pero sus sobreagudos quedaros algo tirantes. Mejor su primer aria. Por lo visto en los tres repartos de este papel, hay cierta crisis de reinas.

Muy bien el Papageno de Andreas Wolf. Voz poderosa y excelente fraseo, ser alemán ayuda en estos casos.
Otro de los triunfadores fue Mikeldi Atxalandabaso, que interpretó un Monostratos evocador de Nosferatum lleno de matices vocales e interpretativos.

La Papagena de Ruth Rosique estuvo en su punto, divertida y chispeante. Muy bien también las tres damas Elena Compons, Marie-Luise Dreben y Gemma Coma-Alabert, a pesar de la indisposición de esta última.

Buena labor realizó Rafal Siwek, como Sarastro, posee un buen registro central, aunque sus graves eran casi inaudibles. Solvente la interpretación de Antonio Lozano y Felipe Bou, como dos hombres con armadura.

Los tres muchachos que interpretan los pequeños cantores de la JORCAM Catalina Peláez, Lucía Seriñán, Celia Martos, Chandra Henderson y Patricia Ginés, María Guzmán, son de esas voces que nunca fallan. Aunque estén casi colgadas a varios metros del suelo.

Un éxito más de esta reedición de una Flauta mágica que siempre es una garantía. Taquilla, espectáculo y público feliz. Misión cumplida.

Texto: Paloma Sanz
Fotografías: Javier del Real

Una flauta mágica de cine

El Teatro Real comenzará el nuevo año con la reposición de la deslumbrante producción de La flauta mágica, de Wolfgang Amadeus Mozart, concebida por Suzanne Andrade, Paul Barritt y Barrie Kosky, presentada con gran éxito en su escenario en enero de 2016.

En esta ocasión se ofrecerán 13 funciones, entre el 19 de enero y el 24 de febrero, nuevamente con el director musical de Teatro Real, Ivor Bolton, al frente de un doble reparto, del Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real y de los Pequeños cantores de la JORCAM.

La creativa y trepidante puesta en escena del director australiano Barrie Kosky, estrenada en la Ópera Cómica de Berlín en 2012, devuelve a La flauta mágica su carácter de alegoría moral para todos los públicos, pero con múltiples capas interpretativas ─del cuento infantil a la reflexión filosófica─, referencias estéticas ─del cine surrealista al comic─, y guiños cómplices al espectador.

La producción carece de decorados y en ella los cantantes interactúan ─con muy escasa movilidad y un meticuloso y preciso trabajo actoral─, con las proyecciones de una película de animación llena de ritmo, humor e imaginación.  En las partes habladas de la ópera ─en realidad un singspiel, que mezcla texto hablado y cantado─ los diálogos aparecen proyectados en cartelas y acompañados al pianoforte por Ashok Gupta, que interpretará fragmentos de la Fantasía en Do menor de Mozart.

El éxito de esta propuesta escénica y dramatúrgica radica en su enorme facilidad para comunicar con el público, su humor, su derroche de creatividad y la complicidad con el espectador a través de un universo visual en el que los personajes mozartianos de hace dos siglos llegan al público convertidos con naturalidad en referentes tan cercanos para nosotros como un galán tipo Rodolfo Valentino (Tamino), una seductora pizpireta como Louise Brooks (Pamina), un malvado como el terrible Nosferatu (Monostatos), o un hilarante, torpe e ingenuo Buster Keaton (Papageno)…

La ausencia de un decorado tradicional, con una ‘escenografía virtual’ reducida a la presencia de una pantalla en el escenario, obliga a los cantantes a actuar con una enorme concentración, talento actoral y movimientos sincronizados, que deben tener la frescura del gag y una precisión de relojería en su coordinación con la proyección de los dibujos.

Un doble reparto se alternará en las representaciones dando vida a los personajes principales ─Andrea Mastroni y Rafal Siwek (Sarastro/Orador), Stanislas de Barbeyrac y Paul Appleby (Tamino), Albina Shagimuratova, Aleksandra Olczyk y Rocío Pérez (La Reina de la Noche), Anett Fritsch y Olga Peretyatko (Pamina), Ruth Rosique (Papagena), Andreas Wolf y Joan Martín-Royo (Papageno) y Mikeldi Atxalandabaso (Monostatos), que estarán secundados por las tres damas de  Elena Copons, Gemma Coma-AlabertMarie-Luise Dreßen y los dos hombres con armadura interpretados por Antonio Lozano y Felipe Bou.

En el foso estará el director musical del Teatro Real, Ivor Bolton, gran experto en la obra de Mozart y titular entre 2004 y 2014 de Orquesta del Mozarteum de Salzburgo, donde ha dedicado más de 10 años a la interpretación del repertorio clásico en la cuna del compositor.

Bolton volverá a dirigir al Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real, en uno de los títulos operísticos más populares, que se presentará por cuarta vez en el reinaugurado Teatro Real después de haberlo hecho en enero de 2001 (Frans Brüggen / Marco Arturo Marelli), julio de 2005 (Marc Minkowski / La Fura dels Baus) y enero de 2016, con esta misma producción.

Coincidiendo con las funciones de La flauta mágica el Teatro Real ha organizado una serie de actividades paralelas relacionadas con la ópera de Mozart y el cine mudo de los años 20 que inspiró la dramaturgia y propuesta escénica de la producción que se verá en su escenario.

Las funciones de La flauta mágica están patrocinadas por la Fundación BBVA como parte de su programa de Música, que se concibe como un recorrido completo por las distintas formas en que la sociedad puede beneficiarse y disfrutar de esta manifestación artística.

Fotografía: Javier del Real

La Flauta Mágica 1

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https://youtu.be/mMmEwLvgk3Q

Una polémica «Flauta Mágica» abre temporada en Les ArtsPor Diego Manuel García Pérez.

Muy controvertida esta Flauta mágica, con una transgresora puesta en escena de Graham Vick, que pretende mostrar los graves desequilibrios que afectan a la sociedad actual, con un claro enfrentamiento entre las clases más privilegiadas y las más desfavorecidas. Grandes cartelones y pancartas reivindicativas dominaban el espacio escénico así como los extremos laterales de las diferentes plantas de la sala, junto  a una gran cantidad de figurantes, que se movían tanto en el escenario como fuera de él. Todo ello, lo que produce es desviar la atención de los espectadores de lo que realmente importa: la maravillosa música mozartiana. Afortunadamente, la orquesta  de la Comunitat Valenciana, bien dirigida por Lothar Koenigs,  ofreció un excelente sonido y el Coro de la Generalitat estuvo a su gran altura habitual. Notable prestación del grupo de cantantes solistas, donde cabe destacar a la soprano italiana Mariangela Sicilia, que ofreció una excelente creación de Pamina.

Die Zauberflöte (La flauta mágica) es un Singspiel (ópera cantada en alemán donde se incluyen diálogos teatrales), en dos actos con música de Wolfgang Amadeus Mozart y libreto de Emanuel Schikaneder. Su estreno tuvo lugar en el popular Theater auf der Wieden de Viena el 30 de septiembre de 1791, dirigido por el propio Mozart y con Schikaneder interpretando el personaje de Papageno. Fue el último estreno del compositor, que moriría dos meses después, el 4 de diciembre, con solo treinta y cinco años. Hoy parece demostrado que fue Mozart quien propuso a Schikaneder (personaje multifacético: empresario, actor, cantante, libretista y director teatral), y no a la inversa, la creación de una ópera alemana  de carácter mágico. Quería repetir el gran éxito obtenido, en 1782, con el Singspiel Die Enführung aus dem Serail (El rapto en el serrallo). El argumento ha sido muy controvertido, por su desordenado entramado. Parece ser que empezaron a redactarlo Schikaneder y el actor y cantante Ludwig Giesecke, junto al propio Mozart, y que cambiaron de criterio una vez escritas las primeras escenas, por lo que, de comedia mágica con una Reina atribulada por el rapto de su hija la princesa Pamina y el galante príncipe Tamino encargado de rescatarla, se convirtió en algo más complejo:  una apología de la francmasonería, a la que se alude claramente al convertir al malvado raptor de Pamina, en el sabio sacerdote Sarastro, quien gobierna un templo al que se accede superando unas pruebas donde se debe mostrar valor y firmeza de carácter. Tamino y Pamina, logran superarlas sellando así su amor, a pesar de las maquinaciones de La Reina de la Noche y de las tres damas a su servicio. El personaje más entrañable de la obra es el sencillo Papageno, cazador de pájaros, en principio al servicio de la Reina de la Noche, y posteriormente convertido en protector de la relación amorosa entre Pamina y Tamino. Este deslavazado argumento es cohesionado por la extraordinaria música de Mozart, en cuyo entramado orquestal se insertan las voces de los diferentes personajes como un instrumento más. Obviamente, al tratarse de una ópera de repertorio habitual, existen muchas grabaciones tanto en CD como DVD. Cabe citar dos grabaciones históricas, con magníficas orquestas y excelentes interpretes, tomadas en estudio y que pueden escucharse completas en YouTube. La primera de ellas fue realizada en Berlín entre 1937 y 1938, con el gran director inglés Sir Thomas Beecham, al frente de la Filarmónica de Berlín. En un ambiente ya prebélico, Beechan no pudo terminar la grabación; que, parece ser, fue concluida por un joven Herbert von Karajan. El reparto estaba encabezado por dos sensacionales interpretes: la soprano alemana Tiana Lemnitz como Tamina, ofreciendo una voz de gran pureza y plena de melancolía, junto al Tamino del tenor danés Helge Roswaenge, voz voluminosa y de gran belleza, con un magnífico fraseo y absoluto dominio del estilo mozartiano. La soprano Erna Berger realiza una excelente creación de la Reina de la Noche. La edición remasterizada por el sello NAXOS, mejora sensiblemente el sonido original. La segunda grabación  recomendada, fue la realizada por EMI, en 1950, con la bellísima respuesta orquestal de la Filarmónica de Viena dirigida por Herbert von Karajan, y un gran elenco vocal con el excelente Tamino del tenor esloveno Antón Dermota, auténtico estilista mozartiano, de una depurada línea de canto, junto a la soprano alemana Irmgard Seefried, una voz de gran belleza tímbrica que interpreta a una sensible y delicada Pamina. Wilma Lipp realiza una gran creación de La Reina de Noche, con magnífico dominio de la coloratura. El resto de personajes están interpretados por excelentes voces: el gran bajo Ludwig Weber, interpreta un sensacional Sarastro, Erich Kunz (Papageno), George London (Sprecher), Emmy Loose (Papagena). A mediados de los años cincuenta del pasado siglo, irrumpe en el panorama lírico el extraordinario tenor alemán Fritz Wunderlich, de bellísima vocalidad y gran temperamento dramático, cuya creación de Tamino resulta antológica, llegando a interpretarlo en muchas ocasiones. En 1964 (dos años antes de su muerte, con apenas treinta y seis años) interpretó Tamino en una grabación de estudio DEUSTCHE GRAMMOPHON, con Karl Böhm al frente de la Filarmónica de Berlín, el gran Hans Otter (Sprecher), Franz Grass (Sarastro), Dietrich Fischer-Dieskau (Papageno), Evelyn Lear (Pamina) y Roberta Peters (Reina de la Noche). Escuchar a Fritz Wunderlich en el aria del retrato “Dies Bildnis ist bezaubernd schön”, es un verdadero deleite canoro.

Existen dos tomas en video, que pueden escucharse completas en YouTube. La primera de ellas realizada en 1983, en la Ópera de Munich, con dirección orquestal de Wolfgang Sawalisch, y comercializada en DVD por DEUSTCHE GRAMMOPHON, con el magnífico Tamino del tenor mejicano Francisco Araiza, de bello timbre y perfecta adecuación estilística al repertorio mozartiano, junto a la excelente Pamina de la gran soprano checa Lucia Popp, con una voz de cristalina pureza, y la Reina de la Noche de Edita Gruberoba, quien muestra su absoluto dominio de la   coloratura. La segunda toma en video recomendada, fue realiza en la Ópera de Zurich, en le año 2000 y comercializada en DVD por ARTHAUS MUSIC, con dirección orquestal de Frantz Welser-Möst, con el magnífico Tamino del tenor polaco Piotr Beczala, cuya voz recuerda la de Fritz Wunderlich, junto a la Pamina de la soprano sueca Malin Hartelius, quien aporta belleza vocal y escénica. El gran bajo finlandés Matti Salminen, compone un imponente Sarastro. Clásica y muy adecuada la propuesta escénica de Jonathan Miller.

No puede decirse lo mismo del montaje escénico de Graham Vick, que ha podido verse en Valencia, con la coproducción del Palau de les Arts, la Ópera de Birminghan y el Festival de Macerata. Los espectadores que entraban en la sala quedaban sorprendidos por una serie de grandes cartelones colgados desde todos los pisos con reivindicativos mensajes: “Contra la violencia machista”, “En defensa de los derechos y la libertad”, “El sistema no puede combatir la corrupción porque la corrupción es el sistema”, “Pensiones justas, ya”. Cantidad de figurantes invadían tanto el escenario como los espacios de unos sufridos espectadores que, lo que pretendían, era pasar un buen rato escuchando la maravillosa música de Mozart. Y, todo ello, es el envoltorio de la propia escenografía, realizada por Stuart Nunn, (también responsable del diseño de vestuario), donde pueden verse tres edificios colindantes: uno de gran altura, en cuya parte superior, aparece el símbolo del euro (El poder financiero), una tienda de Appel (El poder informático, también sede del templo masónico) y una reproducción de la Basílica de San Pedro (El poder de la iglesia). De estos edificios, en algún momento de la función, salen cantidad de figurantes: ejecutivos financieros elegantemente vestidos y rodeados de mujeres sofisticadas, junto a militares y eclesiásticos de rojas púrpuras, que conforman los poderes fácticos, opresores de ese pueblo que se manifiesta con significativas pancartas: “No, es no”, “Nosotros también tenemos voz”, “No nos robéis el futuro”, “Diversidad, Igualdad y Unidad”, en las cercanías de esos emblemáticos edificios, acotados con defensivas vallas. El edificio financiero es girado en algún momento, pudiendo verse en su parte posterior, una batería de misiles ¡connivencia del poder económico y militar! o se nos muestra la parte posterior de la basílica, donde aparece una gran madonna, con la boca tapada ¡la  marginación de la mujer en los centros de poder del mundo eclesiástico católico! Resulta inadmisible la manipulación realizada por Graham Vick de los brillantes diálogos en alemán del texto original, con la inserción de frases en español, donde ese improvisado coro de figurantes actúa a modo de corifeo griego, advirtiendo a los personajes de las posibles consecuencias de sus acciones o reprochándoles su conducta. La pretensión de trasladar una obra inmersa en el mundo de finales del Siglo XVIII a la problemática actual, debería llevar por título: La Flauta mágica con música de Wolfgang Amadeus Mozart y texto de Emanuel Schikaneder, revisado por Graham Vick. El vestuario resulta variopinto, desde ese elegante traje de ejecutivo que porta Sarastro, hasta Papageno envuelto en un disfraz de pollo, pasando por Tamino vestido con chándal y Pamina con una vestimenta que recuerda a la muñeca Olympia de Los cuentos de Hoffmann, o las tres damas embutidas en monos de trabajadoras, que se quitan exhibiendo atractivas vestimentas en consonancia con la que lleva su jefa, la malvada Reina de la Noche ¡Ah! Y, también señalar la presencia de una pala excavadora que hace las veces de la serpiente que persigue a Tamino, y de unos patinetes donde se desplazan los niños soprano. Al final, el desplome de los tres edificios emblemáticos seguido de una macrodanza donde evolucionan todos los participantes ¡preámbulo de un mundo donde reina la paz y la armonía!

Ante tantos figurantes, con sus continuos movimientos escénicos, tiene mucho merito la labor directorial y concertadora de Lothar Koenigs, con el excelente sonido de la Orquesta de la Comunitat Valenciana, que ya se pone de manifiesto en la obertura, la más extensa compuesta por Mozart, con un sorprendente uso del contrapunto, y que tiene su continuación con esa música que envuelve el arioso de un asustado Tamino y la irrupción escénica de las tres damas. Destacar la resolución orquestal tanto del quinteto de Tamino, Papageno y las tres damas, como  del precioso dúo de Pamina y Papageno. La orquesta brilla de sobremanera en todo el amplísimo final del Acto I, con ese solemne acompañamiento que confiere auténtico énfasis al dúo de Tamino y el Sprecher, o el sonido de la flauta mágica en la segunda intervención solista de Tamino, junto a la música que marca la presencia escénica de Sarastro,  y el conjunto orquesta-coro, con el que concluye ese Acto I. Ya, en el Acto II, cabe resaltar el sonido orquestal introductorio con esa “Marcha de los sacerdotes” y la brillante combinación de orquesta y coro en el “Coro de los sacerdotes”. El sonido orquestal envuelve de manera brillante las dos intervenciones solistas de Sarastro. Muy destacada actuación orquestal en las intervenciones solistas de Papageno, con la continua presencia sonora del “glockenspiel”. Pero, sobre todo, cabe destacar, el excelente sonido orquestal en todo el amplio final de la obra, con momentos musicales de extraordinaria calidad: esa gran escena, donde, primeramente, intervienen los dos hombres armados del templo junto a Tamino, con unos sonidos que recuerdan un oratorio dramático, seguido de ese sublime dúo de Pamina y Tamino, en el que se insertan preciosos interludios orquestales donde luce el sonido de la flauta, junto a una coda conclusiva donde se conjuntan de manera brillantísima coro y orquesta. Como en tantos momentos de esta obra, se muestran los contrastes entre el mundo idealizado en el que se mueven Tamino y Pamina, y la realidad tangible, con ese cómico dúo de Papageno y Papagena, donde también –en otro plano- el sonido orquestal resulta muy brillante. Hermosa conjunción de orquesta, voces solistas y coro en el brillantísimo final de este Singspiel. Dentro del alto nivel de todas las secciones orquestales cabe destacar el sonido de oboes, clarinetes y fagots con una especial mención a la flauta solista.

Del extenso grupo de cantantes cabe destacar la magnífica Pamina de la soprano italiana Mariangela Sicilia, voz de atractivo timbre, con anchura y extensión, junto a un excelente fraseo y capacidad para las regulaciones de sonido. Ya muestra su calidad vocal en el precioso dúo con Papageno del Acto I, ofreciendo su mejor prestación en el aria del Acto II  “Ach, ich fühl’s, esist verschuwunden”, cantada con buen estilo mozartiano y gran capacidad dramatica. Magnífica su interpretación de ese sublime dúo “Tamino mein! O welch ein Glück” junto al Tamino interpretado por el tenor ucraniano Dmitry Korchak, de voz ancha con buen registro agudo, aunque mostrando carencias estilísticas, sobre todo al afrontar la dificilísima aria del retrato “Dies Bildnis ist bezaubernd schön”, que exige depurada técnica y gran expresividad. Su actuación mejora en el aria “Wie stark ist nicht dein Zauberton” acompañado por su flauta mágica. Destacar su intervención en el trío del Acto II junto a Pamina y Sarastro, interpretado por el bajo alemán Wilhelm Schwinghammer, de muy elegante presencia escénica, canta con estilo, aunque adolece de esas profundas notas graves que requiere el personaje. También está sometido a las ocurrencias de Graham Vick, teniéndose que mover por el patio de butacas y emitir algunas palabras en español. El barítono inglés Mark Stone, compone un gracioso Papageno, notable en el plano vocal y sobre todo interpretativo, teniendo también que cantar frases en español. Como Reina de la Noche, la soprano checa Tetiana Zhuravel, ofrece una atractiva presencia escénica; y, aunque su voz resulta  pequeña y en exceso ligera, logra resolver de manera notable la coloratura del aria “Der Hölle rache kocht in meinen Hertz”, con esas dificilísimas notas picadas. Bien el Monostatos de Moisés Marín. Muy graciosas las tres damas: Camila Titinger, Olga Syniakova y Marta Di Stefano, pertenecientes al Centro Plácido Domingo. Aceptable el Sprecher interpretado por el bajo Deyan Vatchkov. Notable la creación de Papagena de la soprano Júlia Farrés-Llongueras, quien, en su primera aparición, Graham Vick, la obliga a permanecer cual contorsionista en un pequeño contenedor, y que dota de auténtica comicidad  a su dúo con Papageno. Bien el resto de interpretes incluidos los tres niños-soprano que se desplazan en patinete.

El Coro de la Generalitat vuelve a mostrar su gran calidad en sus muchas intervenciones a lo largo de la obra.

 

La flauta mágica

El Palau de les Arts reivindica la figura de la mujer en el nuevo montaje de ‘La flauta mágica’, de Mozart, que firma el prestigioso director inglés Graham Vick.

El centro de artes inaugura este sábado, 1 de diciembre, su decimotercera temporada de abono con este título, coproducido con el Festival de Macerata (Italia), y que podrá verse hasta el día 15 de este mismo mes en la Sala Principal.

Lothar Koenigs debuta en el foso con los cuerpos estables de Les Arts, el Cor de la Generalitat, la Orquestra de la Comunitat Valenciana y los artistas del Centre Plácido Domingo.

El director alemán, según ha recordado la presidenta del Patronato de Les Arts, Susana Lloret, es una reputada batuta mozartiana, que, tras su paso por València, dirigirá en el Metropolitan de Nueva York ‘La clemenza di Tito’.

Nacido en Aquisgrán, el maestro Koenigs cultiva un repertorio que abarca desde Mozart hasta Alban Berg, con trabajos en las principales capitales líricas como Viena, Nueva York, Múnich o Milán.

Para Lothar Koenigs, ‘La flauta mágica’ tiene una música que “te atrapa y puedes sentir desde dentro. En ella se reconocen diferentes elementos: como las referencias a la música sacra en Sarastro, las melodías sencillas y de fácil retención en Papageno, los elementos oscuros en la segunda aria de la Reina de la Noche…”

El alemán también ha subrayado la importancia del texto que incluye referencias a lo que será el futuro de la ópera, como la escena entre Tamino y el Sacerdote, donde ya se adivina figuras como Wagner.

Versión novedosa

‘La flauta mágica’ es la tercera puesta en escena de Graham Vick que presenta Les Arts, pero la primera realizada por el prestigioso ‘regista’ para el centro operístico valenciano, en colaboración con el Festival de Macerata (Italia).

Graham Vick es uno de los grandes nombres de la escena operística, además de uno de sus mayores renovadores. Como fundador y director artístico de la Ópera de Birmingham, ha convertido a la compañía en estandarte de la modernización y democratización de la ópera. Reconocido con las más altas distinciones, ha desarrollado su faceta de director de escena en los principales teatros del mundo.

Para esta coproducción de ‘La flauta mágica’, el veterano inglés se ha rodeado de un equipo formado por Stuart Nunn, responsable de la escenografía y del vestuario, Giuseppe Di Iorio, artífice de la iluminación, y Ron Howell, coreógrafo.

Según explica Vick, se trata de la quinta producción en su carrera del Singspiel mozartiano. En esta ocasión el inglés ha concebido “una versión totalmente novedosa, incluyendo un final más abierto que suscita muchas preguntas y subraya aspectos como el papel de la mujer”.

En este sentido, el fundador de la Ópera de Birmingham recuerda que la obra de Mozart está influenciada por la masonería: “La sociedad masónica era exclusivamente patriarcal, una realidad también en la Iglesia católica, donde la mujer no tiene poder y no se le permite nunca opinar. Es muy interesante ver que estos dos enemigos tengan eso en común, además del silencio y el secretismo”.

Asimismo, Graham Vick ha reducido el texto en alemán para añadir diálogos en español en los que intervienen los 73 ciudadanos que invitó a participar en el montaje a modo del coro de una tragedia griega, o de una comedia de Aristófanes.

“Recurro a actores no profesionales −idea con la que llevo experimentando veinte años− con la intención de enriquecer la función de ópera, como deber cívico, tanto desde el punto de vista de la representación como del público. Busco un público democrático y un formato de ópera que se dirija a cualquier escala, raza o credo de la comunidad en que vivimos”, ha explicado.

Veteranía y juventud

Les Arts combina veteranía y juventud para el reparto de esta producción, “con la excelencia artística como denominador común”, como ha recordado Susana Lloret en la presentación de la producción.

Dmitry Korchak, uno de los tenores belcantistas más aclamados, regresa al centro de artes para cantar el papel de Tamino. Vinculado al centro operístico valenciano desde sus inicios, el público recordará sus interpretaciones en ‘L’enfant et les sortilèges’, de Ravel, ‘Eugenio Oneguin’, de Chaikovski, ‘La cenerentola’, de Rossini, o ‘Don Giovanni,’ de Mozart.

Debuta en el Palau de les Arts, Mariangela Sicilia como Pamina. Desde su reconocimiento en Operalia 2014, la joven cantante se ha revelado como una de las sopranos italianas con mayor proyección. Le acompaña en su presentación en València la también soprano Tetiana Zhuravel, que encarnó a la Reina de la Noche en el estreno de este montaje en Macerata y que repite este mismo rol.

Mark Stone da vida a Papageno, papel que ha cantado anteriormente en compañías como la Opera de Philadelphia. El barítono británico, que desarrolla una importante carrera como intérprete de recital, posee asimismo una premiada trayectoria discográfica.

Por su parte, el bajo Wilhelm Schwinghammer, figura habitual de festivales de prestigio como Bayreuth o Salzburgo, canta el papel de Sarastro.

Completan el reparto, el bajo búlgaro Deyan Vatchkov (orador/primer sacerdote), el tenor granadino y antiguo alumno del Centre Plácido Domingo Moisés Marín (Monóstatos), el bajo galés Richard Wiegold (segundo armado), la soprano catalana Júlia Farrés-Llongueras (Papagena), la soprano italo-brasileña Camila Titinger (primera dama), las mezzosopranos del Centre Plácido Domingo Olga Syniakova y Marta Di Stefano, el tenor valenciano y también integrante del Centre de Perfeccionament Vicent Romero y los niños del Trinity Boys Choir: Lucas Rebato, Kiran Patel y Dionysios Sevastakis.

En total, Les Arts ofrecerá seis funciones de este innovador montaje de ‘La flauta mágica’ los días 1, 4, 7, 9, 13 y 15 de diciembre.

Wilhelm Schwinghammer

Wilhelm Schwinghammer es uno de los bajos más reconocidos de su joven generación. Su amplio repertorio abarca desde el barroco a la música contemporánea, e incluye los roles más importantes de su tesitura como Figaro (Le Nozze di Figaro), Leporello (Don Giovanni), Sarastro (Die Zauberflöte), Osmin (Die Entführung aus dem Serail), König Heinrich (Lohengrin), König Marke (Tristan und Isolde), Landgraf Hermann (Tannhäuser), Daland (Der fliegende Holländer), Fasolt (Das Rheingold), Rocco (Fidelio), Sparafucile (Rigoletto) y Orest (Elektra). En Mayo 2018 debutó como Baron Ochs (Der Rosenkavalier) en la Ópera de Estocolmo.

Ha cantado en la mayoría de los principales teatros de ópera como Múnich, Berlín, Dresde, Lyon, Milán, Viena, Barcelona, Los Angeles, Washington, Chicago y Hong Kong Arts Festival. Wilhelm Schwinghammer se ha ganado también una sólida reputación como concertistas y actúa habitualmente con renombradas orquestas como la Filarmónica de Berlín, Sinfónica de Boston, Sinfónica de Bamberg,  NDR Elbphilharmonie Orquesta y il Concerto Köln. En ópera y conciertos ha sido dirigido por Daniel Barenboim, Zubin Mehta, Kirill Petrenko, Andris Nelsons, Sir Simon Rattle, Marek Janowski, Sebastian Weigle, Philippe Herreweghe, entre otros prestigiosos directores.

En 2005 debutó en el Festival de Salzburgo como Dr. Grenvil en La Traviata con Anna Netrebko y Rolando Villazón. En 2011 volvió al Festival de Pascua de Salzburgo con Salome, dirigida por Sir Simon Rattle. Canta regularmente en el Festival de Bayreuth, donde debutó triunfalmente en 2012 como König Heinrich en Lohengrin, rol que repitió en los años sucesivos, y en 2014 y 2015 cantó, además, Fasolt en Das Rheingold, con dirección escénica de Frank Castorf.

Entre sus éxitos recientes cabe destacar una nueva producción del Ring en Chicago (dirección escénica de David Poutney), el rol titular en la nueva producción de Le Nozze di Figaro de Stefan Herheim en Hamburgo, y, en ese mismo teatro, Osmin en Die Entführung aus dem Serail.

Wilhelm Schwinghammer nació en Baviera e inició sus estudios musicales con los famosos Regensburger Domspatzen. Estudió en la Universidad de Berlín (Universität der Künste) con Harald Stamm y asistió a master-classes con Kurt Moll y Marjana Lipovšek. En 2003 fue admitido en el Programa Joven de la Ópera de Hamburgo y en 2006 entró a formar parte del conjunto estable de dicho teatro. Desde 2017 actúa como artista freelance. Ha sido premiado en diversas ocasiones y el 2009 ganó el prestigioso ARD Music Competition, donde también obtuvo el Premio del Público.

Joel Prieto

Tras una temporada en la que ha acumulado debuts y triunfos en Europa, Estados Unidos y Asia con compromisos en Toulouse, Varsovia, Tokyo, Los Angeles, Dresde, Moscú y Beijing, Joel Prieto comenzará el nuevo curso en octubre afrontando por primera nuevamente el rol de Iopas en la ópera de Berlioz Les Troyens, título que el tenor ya ha cantado en la Deutsche Oper Berlin y que se representará en la emblemática Semperoper de Dresde los días 3, 6, 9, 21 y 27 de octubre y 3 de noviembre.

Con una partitura vibrante y musicalmente apasionante, esta grand opéra basada en la Eneida de Virgilio y raramente representada por su complejidad cuenta una historia épica de guerra y paz, fiel al espíritu del Romanticismo francés, y reúne sobre el escenario a más de 120 cantantes entre coro y solistas. Las representaciones en Dresde estarán dirigidas musicalmente por Lothar Koenigs en una nueva producción que firma Lydia Steier. Para Joel Prieto, la temporada pasada «ha sido de vértigo, un curso en el que me ha acompañado mi querido Mozart en debuts que me llenaron de emoción y que me permitieron subir a emblemáticos escenarios en los que siempre soñé cantar como son la Ópera de Varsovia, la Ópera de Los Ángeles, el Teatro Bolshoi de Moscú o el Tianqiao Performing Arts Center de Beijing, además de poder interpretar la Novena Sinfonía de Mozart nada menos que junto a la NHK Symphony Orchestra de Tokyo», comenta el tenor. «En los próximos meses tengo unas ganas enormes de lanzarme a nuevos repertorios en los que estoy seguro que voy a tener una maravillosa experiencia», añade.

Tras este arranque en Alemania a Joel Prieto le esperan su regreso al Teatro Real de Madrid -su ciudad natal-, escenario en el que debutó hace dos temporadas con La Flauta Mágica y al que vuelve con uno de los acontecimientos más esperados de la cartelera española como es el estreno madrileño de Street Scene, de Kurt Weill (febrero de 2018); su esperada vuelta a Puerto Rico, donde el artista creció junto a su familia, ocasión que marcará un momento muy especial en su agenda interpretando el Requiem de Mozart dentro de la programación del Festival Casals (marzo de 2018); en abril regresará al Teatro Municipal de Santiago de Chile, esta vez para meterse en la piel de Don Ottavio en Don Giovanni, de Mozart.

Más información: http://joelprieto.com/

Joel Prieto

Después de su paso en los últimos dos meses por los coliseos líricos de Dresde, Düsseldorf, Varsovia y Moscú, el tenor hispano-puertorriqueño Joel Prieto volverá a vestirse del Príncipe Tamino de La flauta mágica de Mozart, con el que acaba de debutar con gran éxito en el Teatro Bolshoi, esta vez para su debut en China, en el Tianqiao Performing Arts Center de la capital del gigante asiático (21 y 23 de julio). Y lo hace nuevamente en la genial puesta en escena de Barrie Kosky y Suzanne Andrade para la Komische Oper de Berlín que rinde homenaje al cine mudo y que Joel Prieto ya ha interpretado en el Teatro Real de Madrid, en la Ópera de Varsovia y en el Bolshoi moscovita.

En lo que va de año el joven tenor ha subido a algunos de los escenarios más importantes del mundo incluyendo, siempre con Mozart, la Ópera de Los Ángeles (El rapto del Serrallo); la Semperoper de Dresde (El rapto del Serrallo); Gran Teatro de Varsovia (La flauta mágica); y Teatro Bolshoi de Moscú (La flauta mágica).

Aunque no todo es Mozart en la agenda de Joel Prieto: tras su debut en Beijing (China) se anuncia su vuelta a la Semperoper de Dresde como Iopas en Les Troyens, de Berlioz; al Teatro Real de Madrid para participar en Street Scene, de Kurt Weill; su debut en el Festival Casals de Puerto Rico con el Requiem de Mozart; y su regreso al Teatro Municipal de Santiago de Chile como Don Ottavio de Don Giovanni.

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Joel Prieto

El tenor Joel Prieto continúa cosechando triunfos y conquistando nuevas plazas operísticas. Si el pasado enero debutó en la Ópera de Los Ángeles
(Estados Unidos) con la mozartiana El rapto del Serrallo, en marzo participó en la tradicional AIDS Gala 2017 de la Deutsche Oper am Rhein en Düsseldorf; en abril regresó a la Semperoper de Dresde (Alemania) con su Belmonte de El rapto del Serrallo por primera vez en Europa -en siete funciones que se alargarán durante mayo y junio- sin olvidar, siempre en abril, una única actuación como Tamino de La flauta mágica en el Gran Teatro de Varsovia (Teatr Wielki, Polonia), sede de la Ópera Nacional Polaca, en la aplaudida puesta en escena de Barrie Kosky y Suzanne Andrade que rinde homenaje al cine mudo y que Joel Prieto ya ha interpretado en el Teatro Real de Madrid.

Joel Prieto sumará en mayo un nuevo debut que le ilusiona especialmente: subir por primera vez al escenario del Teatro Bolshoi de Moscú, en el que cantará -los días 24 y 26 de mayo- su aclamado Príncipe Tamino, de La flauta mágica, y en la misma y exitosa producción de Kosky que ya tiene todas las localidades vendidas. «Lo cierto es que está siendo un año de debuts tanto de personajes como de nuevos escenarios. Cantar en un teatro emblemático y de gran tradición como es el Bolshoi me apasiona, más teniendo en cuenta que lo haré en una producción que ya he cantado en varios teatros y que me encanta», comenta el cantante.

El que fuera ganador del Concurso Operalia en 2008, además de triunfar con Mozart allí donde va también se pasea por otros repertorios como el del bel canto romántico y el de la ópera romántica francesa, así como algunos de los títulos más emblemáticos de zarzuela. Joel Prieto tiene compromisos cerrados en su agenda para los próximos tres años, entre los que destacan su debut en Beijing (China) con La flauta mágica; su vuelta a la Semperoper de Dresde como Iopas en Les Troyens, de Berlioz; al Teatro Real de Madrid para participar en Street Scene, de Kurt Weill, en una nueva coproducción del coliseo madrileño con la Opéra de Monte-Carlo y la Oper Köln de esta «ópera estadounidense», tal y como la bautizó el propio Weill; su debut en el Festival Casals de Puerto Rico con el Requiem de Mozart, además volver al Teatro Municipal de Santiago de Chile, esta vez para asumir el rol de Don Ottavio en Don Giovanni.

Más información

Joel Prieto

El tenor Joel Prieto, ganador del Concurso Operalia en 2008, debutó en enero en la Ópera de Los Ángeles (Estados Unidos) como Belmonte en la ópera mozartiana El rapto del Serrallo -«probablemente el papel más difícil que he cantado en mi carrera», según el joven cantante-, obteniendo un considerable triunfo personal, tanto de público como de crítica [«Prieto aportó virtudes vocales mozartianas con una delicada línea de canto, excelente en el pasaje y con un fiato infinito… La suya es una voz de auténtica calidad… Su actuación rozó la perfección». «Joel Prieto cantó un Belmonte casi con el sonido de un oboe, siempre en el centro exacto de la nota»]. El tenor nacido en Madrid, criado en Puerto Rico y formado en Nueva York, sigue fiel a Mozart y en abril, mayo y junio regresará a la Semperoper de Dresde (Alemania) esta vez para mostrar su Belmonte en siete funciones, mientras que, el 28 de abril, ofrecerá una única actuación como príncipe Tamino de Die Zauberflöte en el Gran Teatro de Varsovia (Teatr Wielki, Polonia), sede de la Ópera Nacional Polaca. Se trata de una reposición de la aplaudida puesta en escena de Barrie Kosky y Suzanne Andrade que Prieto ya ha interpretado tanto en el Teatro Real de Madrid (España) como en el principal coliseo de la capital polaca.

En Dresde, en cambio, Joel Prieto será Belmonte en un montaje firmado por Michiel Dijkema, con Christopher Moulds a la batuta.

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Teatro Real

El Teatro Real se prepara para un nuevo estreno de su temporada más familiar, con la puesta en escena de La flauta encantada, un espectáculo creado a partir de La flauta mágica, de W.A. Mozart, en el que los más pequeños de la casa disfrutarán con las aventuras y la música de una de las óperas más conocidas del compositor alemán, los días 27 y 28 de febrero y 5 y 6 de marzo, en sesiones dobles, a las 12.00 y a las 17.00h.

Para llevar a cabo este proyecto, en el que el video, la música y la palabra se integran creando una atmósfera mágica, el Teatro Real ha contado con un equipo artístico encabezado por la polifacética actriz Pilar Massa, responsable del guión, la puesta en escena y la creación videográfica, cuya interpretación es la columna vertebral de este “cuento”. Pilar relata las peripecias de Tamino y Papageno en busca de la princesa Pamina, representados en los coloristas dibujos de Ximena Maier.

El espectáculo transita a través de los momentos musicales más conocidos de La flauta mágica, entre la obertura y un originalísimo final, versionados por el quinteto de cuerda Wiener Kammersymphonie, en directo, con dirección musical de Sergio Mastro. Se suceden, a lo largo de una hora, algunas de las arias más famosas de la ópera de Mozart, que sirven de guía “para que la Reina de la Noche recuerde la historia de esta Flauta encantada tal y como ‘suena’. Su música tiene tanta emoción que las fieras del bosque, los niños, y hasta la Reina de la Noche se acercan a escucharla como por encantamiento”, tal y como nos describe la guía didáctica del espectáculo.

El Programa Pedagógico de La flauta encantada cuenta con el patrocinio de La Caixa y con el apoyo del Banco de España.

Más información en la guía didáctica del espectáculo, disponible en la web del Teatro Real, con acceso libre y gratuito.

La flauta encantada

Espectáculo musical con proyecciones

Nueva producción en el Teatro Real

INTÉRPRETES

Wiener Kammersymphonie (Quinteto de Viena)

Dirección Musical: Sergio Mastro

Guión, puesta en escena e interpretación: Pilar Massa

Diseño de dibujos: Ximena Maier

Diseño de luces: Paco Ariza

Edición de proyecciones: Insuel SL

Duración:  60 minutos aproximadamente

Público preferente: a partir de 4 años

Teatro Real. Sala Gayarre

*Entradas agotadas para todas las funciones, todos los días

Joel Prieto ©Simon Pauly

El joven tenor hispano-puertorriqueño Joel Prieto, se ha estrenado por fin en el Teatro Real de Madrid, su ciudad natal, interpretando el papel de Tamino, en La flauta mágica de Mozart. Es este un papel que conoce bien pues debutó con el profesionalmente hace diez años.

La producción de Barrie Kosky para la Komische Oper de Berlín y dirigida en Madrid por Ivor Bolton, suponen un antes y un después en su carrera tras el éxito de público y críticas.

Nos recibe en el Teatro, entre función y función, y nos habla de su trayectoria, del éxito y dificultades de esta producción y de sus próximos retos profesionales.

La flauta mágica

Entre los días 16 y 30 de enero el Teatro Real ofrecerá doce funciones de La flauta mágica, de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791), en una producción procedente de la Komische Oper de Berlín, que desde su estreno en 2012 se ha presentado en varios teatros y festivales de manera casi ininterrumpida: Óperas de Los Ángeles y de Minnesota, Óperas de Düsseldorf y Duisburgo, Festivales de Edimburgo y de Sankt Poelten y una gira por las ciudades chinas de Cantón y Xiamen. Después de Madrid la producción seguirá su andadura por París y Barcelona.

El éxito de esta propuesta escénica y dramatúrgica radica en su enorme facilidad para comunicar con el público, su humor, su derroche de creatividad y los guiños cómplices al espectador a través de un universo visual tan conocido como el cine mudo de los años 20, en el que desfilan desde un galán tipo Rodolfo Valentino (Tamino) a una Pamina que recuerda a Louise Brooks en Lulu, o el Nosferatu evocado por la figura del malvado Monostatos. El inconfundible lenguaje corporal de Buster Keaton (Papageno) aflora en la gestualidad de muchos de los personajes en su diálogo con la pantalla, transformada en una escenografía virtual realizada con las más sofisticadas técnicas del cine de animación por Suzanne Andrade, Paul Barritt y su compañía 1927, creada por ambos en Londres en 2005.

La ausencia de un decorado tradicional propicia también la movilidad de la producción, que vive del talento actoral de los intérpretes, cuyos movimientos deben tener la frescura del gag y una precisión de relojería en su coordinación con la proyección de los dibujos de la pantalla.

Dos repartos corales -con Joel Prieto y Norman Reinhardt (Tamino), Sophie Bevan y Sylvia Schwartz (Pamina), Joan Martín-Royo y Gabriel Bermúdez (Papageno), Ana Durlovski y Kathryn Lewek (la Reina de la Noche), Christof Fischesser y Rafal Siwek (Sarastro) y Ruth Rosique (Papagena), entre otros- han trabajado meticulosamente bajo la dirección de Tobias Ribitzki, asistente de Barrie Kosky y encargado de todas las reposiciones de la producción.

En esta evocación del cine mudo los diálogos hablados de La flauta mágica aparecen proyectados en cartelas y acompañados al pianoforte por Luke Green, que interpretará fragmentos de la Fantasía en Do menor de Mozart.

En el foso estará el Director Musical del Teatro Real, Ivor Bolton, titular desde 2004 de la Orquesta del Mozarteum de Salzburgo, donde ha dedicado más de 10 años a la interpretación del repertorio clásico en la cuna del compositor. Bolton volverá a dirigir el Coro y Orquesta titulares del Teatro Real en uno de los títulos operísticos más populares, que se presentará por tercera vez en el reinaugurado Teatro Real después de haberlo hecho en enero de 2001 (Frans Brüggen / Marco Arturo Marelli) y julio de 2005 (Marc Minkowski / La Fura dels Baus).

Coincidiendo con las funciones de La flauta mágica el Teatro Real ha organizado una serie de actividades paralelas relacionadas con la ópera de Mozart y con el cine mudo de los años 20 que inspiró la dramaturgia y propuesta escénica de la producción que se verá en su escenario.

‘LA FLAUTA MÁGICA’

ACTIVIDADES PARALELAS

Círculo de Bellas Artes – Proyecciones

Ciclo de películas dedicado a Buster Keaton

http://www.circulobellasartes.com/ciclos-cine/generacion-keaton-3/

Coincidiendo con la representación en el Teatro Real de La flauta mágica con una escenografía y una puesta en escena tomada de Buster Keaton y de los pioneros de la comedia americana, el Cine Estudio realiza un amplio ciclo dedicado al slapstick. En él tienen cabida Buster Keaton, Charles Chaplin, Stan Laurel, Oliver Hardy y Fatty Arbuckle, pero también muchos cómicos (y cómicas) hoy olvidados que rescatamos para nuestros espectadores.
7 a 31 de enero.

Círculo de Bellas Artes – Cine Estudio

Filmoteca Española
La flauta mágica (Trollflöjten), de Ingmar Bergman, 1975

http://www.mecd.gob.es/cultura-mecd/areas-cultura/cine/mc/fe/cine-dore/programacion.html

Adaptación televisiva de la ópera de Mozart, desde la visión personal del director sueco.
21 y 31 de enero de 2016

Cine Doré

Los domingos de cámara

De Mozart a Wagner

Actividad paralela a La flauta mágica y La prohibición de amar

http://www.teatro-real.com/es/espectaculos/1976

Programa

Parte I

Serguéi Prokofiev: Sonata para dos violines en do mayor Op. 56
Richard Wagner / Karl Stiegler: Lohengrin – Fantasía para 8 trompas

Parte II

Wolfgang Amadeus Mozart: Quinteto para clarinete y cuerda en la mayor, K 581

Solistas de la Orquesta Titular del Teatro Real

17 de enero, a las 12.00 h.

Teatro Real. Sala principal

¡Todos a la Gayarre! 

La flauta mágica
Cita con la Reina de la Noche y Papageno, en la que se interpretarán canciones,

 cuentos y juegos de muy distintos estilos.

http://www.teatro-real.com/es/espectaculos/1982

Taller concebido y presentado por Fernando Palacios

Con la participación del pianista Federico Lechner

17 de enero, a las 12.00 y a las 17.00 h.

Teatro Real. Sala Gayarre

Entrada por la calle Felipe V

Joel Prieto

El tenor de Puerto Rico Joel Prieto desembarca en Madrid con toda la ilusión que le depara debutar en su ciudad natal. Considerado como el más importante tenor mozartiano del momento, el cantante madrileño será el Príncipe Tamino en el Teatro Real los días 16, 19, 22, 24, 26, 28 y 30 de enero de 2016 en la aclamada producción de Barrie Kosky de La flauta mágica. Después de sus últimas actuaciones -Narraboth en la Salome de Richard Strauss en Lyon (Francia) y Timonel en El Holandés errante en la Staatsoper de Berlín (Alemania)-, Prieto vuelve a España tras su aplaudido regreso al Gran Teatre del Liceu barcelonés el curso pasado como Ferrando de Così fan tutte. En Madrid el joven ganador de Operalia actuará bajo la dirección de Ivor Bolton, con quien ya ha trabajado anteriormente: «Nos llevamos muy bien con el maestro y siempre nos da buenos consejos a los cantantes», afirma el tenor. «Además estaré junto al Papageno de Joan Martín Royo, a quien también conozco mucho, o sea que en el Real nos vamos a sentir como en casa».

Respecto de su debut madrileño, confiesa que está muy emocionado: «Me llena de alegría cantar en la ciudad en que nací y pasar un tiempo con mi familia española». El tenor debutó profesionalmente como Tamino en 2006 en la Deutsche Oper de Berlín, papel que retomó en 2011 para su debut en la Staatsoper Unter den Linden berlinesa y con el que regresó a ese mismo escenario en 2013 junto a estrellas como Anna Prohaska y René Pape. Saludado por su amplio dominio del repertorio mozartiano, es uno de los artistas más solicitados de su generación sobre todo desde que en 2008 ganara el prestigioso concurso Operalia creado y presidido por Plácido Domingo.

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